Inversión de Impacto en Colombia: Ecosistema en construcción

Inversión de Impacto
agosto 24, 2019
Educación en Inversión de Impacto: Un diálogo entre universidades, inversionistas y emprendedores
octubre 9, 2019

INVERSIÓN DE IMPACTO EN COLOMBIA: Ecosistema en construcción

Septiembre 2, 2019

Elaborado por: Luz Mila Lancheros C. y Gabriela Carrasco R. 

Desde noviembre de 2018 hasta mayo de 2019, tuvimos la oportunidad de entrevistar a más de 90 actores del sector de inversión de impacto en Colombia y Latinoamérica, entre ellos emprendedores sociales, inversionistas de impacto, aceleradoras, articuladores, fundaciones y organizaciones en los sectores privado, público, social y académico y queremos compartir a continuación los principales hallazgos derivados de nuestras conversaciones. Esto como resultado adicional al de la caracterización de los inversionistas de impacto en Latinoamérica, iniciando por Colombia, que estamos haciendo en ecosistemadeimpacto.org 

De los principales desafíos y oportunidades que se han identificado en Latinoamérica en los últimos años en estudios como los realizados por LAVCA y ANDE publicados en 2016 y 2018, el de Impaqto de 2018, y el de la Alianza por la Inversión de Impacto en México de 2018, entre otros, y que pudimos también corroborar nosotras para Colombia en nuestras conversaciones resaltamos que por un lado, los inversionistas manifiestan no encontrar de manera eficiente los proyectos para llevar a cabo las inversiones que estos proyectan hacer en un determinado tiempo, es decir, manifiestan la falta de proyectos listos para recibir inversión. Por otro lado, los emprendedores sociales manifiestan no saber qué inversionistas de impacto están presentes en el país y la región ni cómo aproximarse y acceder a los fondos. Adicionalmente, un reto que se ha identificado por parte de los inversionistas en Colombia y en Latinoamérica es el de diseñar y desarrollar vehículos de inversión apropiados para el despliegue de capital destinado a este tipo de inversiones. Así mismo, se presenta el reto de aumentar el monto de capital disponible para inversión de impacto en la región, especialmente para emprendimientos en incubación y etapas tempranas. Esto aunado al reto de desbloquear capital de sectores como la filantropía tradicional e inversionistas locales para que destinen parte de su capital a este tipo de proyectos. 

Ahora bien, en esta ocasión quisiéramos ahondar y compartir otros de los principales desafíos y oportunidades que identificamos en Colombia derivados de nuestras recientes conversaciones:

Existe una asimetría de información entre inversionistas de impacto y emprendedores sociales respecto del ecosistema de inversión de impacto en el país 

  • Se evidencia la necesidad de un espacio en donde se puedan juntar todos los actores para compartir buenas prácticas, conocimiento, desarrollar el mercado, avanzar en políticas públicas, y que sea asequible y accesible a todas las partes interesadas. 
  • Es necesario organizar y articular a los actores para avanzar conjuntamente en temas necesarios para la construcción y consolidación del ecosistema en Colombia. Existen en el país diferentes iniciativas e intenciones de agrupación principalmente por parte de los inversionistas tales como la Alianza por la Inversión de Impacto Colombia (task force de Global Steering Group GSG en el país), la Coalición de Finanzas Innovadoras de Concordia, la ANDE, la Red de Filantropía Estratégica e Inversión Social del IVPC (Internacional Venture Philantropy Centre) respecto de las cuales se reconoce los avances que pretende cada una de ellas, y se hace evidente la necesidad de unir esfuerzos, para que estos no se dupliquen y/o sobrepongan, y de compartir la información con las otras partes interesadas del ecosistema respecto de los objetivos, ruta y avances de cada uno de los grupos de trabajo. 
  • Adicionalmente, se evidencia la necesidad de centralizar espacios para que aquellos que conocen los mercados y los proyectos en campo en los cuales se desarrolla la inversión de impacto puedan compartir sus experiencias y conocimientos respecto de las condiciones sociales, políticas, climáticas y económicas de los proyectos. 
  • La inversión de impacto es un sector que aún es muy nuevo en el país. Todos necesitamos aprender: inversionistas, emprendedores, aceleradoras, articuladores, asesores legales y gobierno.  La inversión de impacto es hecha a la medida de las necesidades de cada negocio y es un proceso de co-creación, no es banca tradicional ni se constituye en contratos de adhesión, debe construirse paso a paso entre todas las partes interesadas.

Tiende a haber una falta de capacidades y habilidades en los emprendedores sociales y sus equipos, no sólo financieras y técnicas, sino también y no menos importante en habilidades blandas

  • Uno de los grandes desafíos para el ecosistema respecto de los emprendedores sociales es desarrollar el carácter de líderes y creadores de cambios orientados tanto por la misión como por la proyección de sus negocios. Además de las habilidades técnicas y financieras que los emprendedores deben desarrollar, las habilidades blandas como la resiliencia, gestión de conflictos, gestión de tiempo, habilidades de comunicación, inteligencia emocional, gestión del cambio, entre otras, son un aspecto clave que debe incluirse en la construcción de los equipos. 
  • Las habilidades blandas junto con las habilidades duras les darán capacidades a los emprendedores e inversionistas para negociar de una forma más clara, en un lenguaje comprensible para todas las partes y de una forma más equitativa. 
  • Se ha evidenciado que las habilidades blandas permiten generar relaciones interpersonales más cercanas, fuertes y duraderas, y que las relaciones entre diferentes actores ha sido preámbulo en muchos de los casos en inversiones de impacto. Al respecto, la mayoría de los inversionistas manifestaron que encontrar a los emprendedores sociales y proyectos es una de las partes del proceso de inversión que más tiempo consume y que representa uno de los mayores retos poderla hacer más eficiente. Así mismo, manifestaron que generalmente los proyectos no llegan a ellos por convocatorias abiertas, sino por referidos, eventos, redes y espacios de emprendimiento. 

Existe la necesidad y oportunidad de desarrollar el talento humano para el sector de inversión de impacto en el país

  • El desarrollo del talento humano es un desafío central para escalar la inversión en empresas sociales en Colombia y Latinoamérica. Además, en términos de escalabilidad debe verse más allá del mercado colombiano como el objetivo final. 
  • Es necesario normalizar el hecho de que un emprendimiento social, así como puede generar impacto puede ser financieramente sostenible. Muchos expertos financieros carecen de experiencia en los aspectos sociales de la inversión de impacto. Al mismo tiempo, muchos expertos en el sector social carecen de experiencia para realizar inversiones financieras. Ahora bien, aunque una nueva generación de asesores con experiencia en combinar filantropía e inversión (así como cuestiones legales innovadoras relacionadas) está creciendo, solo hasta ahora está surgiendo. Por lo tanto, suele ser difícil formar equipos con la experiencia necesaria tanto en impacto como en rendimiento y sostenibilidad financiera.
  • Existe la necesidad de desarrollar el talento humano para el sector de inversión de impacto en el país, respecto de todas las partes interesadas, no sólo respecto de los emprendedores. Relacionado con esto identificamos una gran oportunidad para ser explorada desde la academia en la educación superior, de manera que profesionales en formación puedan aproximarse a estos temas desde antes de enfrentarse al mercado laboral y proyectarse ejerciendo sus carreras con esta aproximación, bien sea desde el lado del emprendedor, del inversionista, de las incubadoras y aceleradoras, del creador de políticas públicas, etc.  
  • Además es una oportunidad también para que profesores y directivas de las universidades puedan ahondar en el tema de inversión de impacto y se empiecen a identificar rutas en las cuales se pueda avanzar en el tema desde la investigación y la práctica en Colombia. Así mismo, es un buen momento para avanzar y ampliar la participación en espacios académicos internacionales tales como el Consorcio de la Universidad de Northwestern, al cual asistieron varios representantes de universidades colombianas en 2019, y generar espacios similares a nivel nacional para generar conocimientos y compartir buenas prácticas.
  • Adicionalmente, evidenciamos la necesidad de desarrollar estrategias de atracción y retención de talento en el espacio de inversión de impacto, especialmente en los equipos de los emprendedores. En algunos casos se han generado, por ejemplo, incentivos relacionados con participación a futuro en las empresas. Sin embargo, en este espacio todavía hay un campo grande por explorar. 

El sector rural en Colombia tiene mucho potencial pero continúa estando muy desconectado

  • Agricultura e Inclusión Financiera son los principales sectores en los cuales los inversionistas de impacto están centrando sus tesis de inversión en el país. Ahora, para tener acceso a los mercados muchos de los inversionistas resaltan la importancia de tener aliados locales y aquellos que ya estén en las cadenas de los negocios, que conozcan la geografía, la situación social, económica y política. Es decir, es necesario apoyar la creación de lazos de confianza entre comunidades y con los inversionistas como parte de la exploración,  acercamiento y finalmente proceso de inversión. 
  • Uno de los principales retos en el contexto colombiano es la desconexión de las áreas rurales en el país. Hay falta de infraestructura y riesgos de seguridad para el transporte y la logística en general. Esto hace que llevar los productos del campo a las grandes ciudades y/o a los puertos para exportación represente un alto grado de dificultad y costos. Adicionalmente, hay una concentración importante del sector financiero en Colombia en las ciudades. 
  • Además, varios actores manifestaron que existe una oportunidad muy grande en el tema de tecnologías aplicadas a generar impacto, particularmente en los sectores de agricultura y educación. 

Existen desafíos regulatorios y la oportunidad de desarrollar políticas públicas e incentivos para el desarrollo del ecosistema 

  • Los inversionistas de impacto manifestaron la necesidad de que el gobierno tenga un rol más activo en el desarrollo y construcción del ecosistema de impacto en Colombia. Adicionalmente, manifestaron que es importante que tenga presente que el capital destinado a inversión de impacto es un capital de riesgo, y por lo tanto deberían desarrollarse políticas públicas e incentivos para que más actores se interesen en este tipo de inversiones. 
  • Desde el punto de vista regulatorio existe un espacio importante en el país para el desarrollo de innovaciones legales y financieras para permitir que el ecosistema crezca y se fortalezca, y además se generen incentivos no solo para los inversionistas sino también para los emprendedores sociales. 
  • Dado que la mayoría de los inversionistas presentes en Colombia tienen su sede principal en Estados Unidos o Europa, y hacen sus inversiones en moneda local y moneda extranjera, estos manifestaron que se enfrentan a un evidente riesgo cambiario y de estabilidad de los mercados muy alto. 
  • Los inversionistas de impacto en Colombia se identifican en su mayoría como fondos de inversión de impacto y administradores de fondos. Sin embargo, pudimos identificar fundaciones, ONGs y cooperativas que también están haciendo inversión de impacto. A su vez en el mundo hay bancos, DFIs, empresas de familia, fondos de pensiones, oficinas de inversiones permanentes que en Colombia aún no identificamos como inversionistas de impacto. Así mismo, en el país hay inversionistas que hacen inversiones convencionales y también inversión de impacto pero no se identifican como inversionistas de impacto. Así, existe la oportunidad de ampliar el capital disponible  para inversión de impacto e inversionistas de impacto en el país. 

La medición y gestión del impacto es un desafío para el ecosistema

  • Si bien ha habido grandes avances en diseñar estándares para la medición de impacto, tales como IRIS, GIIRS e Impact Management Project, ha resultado difícil coordinar uno sólo y definir si el ideal debería ser tener un estándar. Tradicionalmente, las inversiones y el impacto social ocupaban diferentes ámbitos de la vida, enfoques y fuentes de capital, y los enfoques de impacto social y evaluación eran específicos de los inversionistas. 
  • De nuestras conversaciones con inversionistas de impacto en Colombia pudimos identificar que la mayoría de ellos tienen métricas propias de medición, lo cual hace que haya dificultad en comparar las inversiones y su impacto. Cada uno está midiendo diferente, aunque en muchas ocasiones sus métricas son similares y/o inspiradas en las métricas estandarizadas.
  • Para los emprendedores también es un reto poder generar sus propias métricas de medición de impacto y presentarle a cada uno de los inversionistas lo que cada uno requiere.
  • Es un desafío para el mercado, a nivel nacional, regional e internacional determinar si deberían seguir los esfuerzos por propender por una uniformidad o estandarización de métricas, o si debería cada organización determinar sus métricas propias. 
  • En general, desde las diferentes perspectivas de los actores en el ecosistema hay un espacio amplio de oportunidades y desafíos en la educación y formación respecto de medición de impacto.  

Por último, GIIN desarrolló una hoja de ruta, la cual ofrece dieciocho acciones específicas que la comunidad de inversión de impacto debería tomar con urgencia y puede servir de inspiración y guía para determinar los pasos a seguir en inversión de impacto en el país. estos  pasos que que se sugieren tomar hoy no solo abordarán las necesidades más inmediatas y apremiantes de la inversión de impacto, sino que también tendrán un efecto importante hacia el futuro.